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Sidenor y sindicatos acuerdan negociar el convenio en paralelo al ERTE

La dirección de Sidenor y los sindicatos han acordado abrir el próximo lunes la negociación del convenio colectivo del Grupo en paralelo a la negociación del Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE), cuyas causas han sido aceptadas por la mayoría sindical.

El ERTE anunciado por el grupo siderúrgico Sidenor para sus plantas se aplicaría durante dos años, en 2017 y 2018, e implicaría una reducción media del tiempo de trabajo de un 50 %, aunque con diferente afectación según los centros de trabajo.

 En la tercera reunión negociadora, celebrada hoy en la planta de Basauri (Vizcaya) durante toda la jornada, la empresa ha propuesto un complemento salarial al desempleo para los afectados por el ERTE del 75 %, que no han aceptado los sindicatos, según fuentes de las centrales.

La dirección también pretende aplicar un Plan de Adaptación Laboral, con medidas de flexibilidad y movilidad geográfica y horaria, ante lo que se ha acordado abrir el lunes la negociación del convenio del grupo, que expiraba el 31 de diciembre.

Según fuentes de ELA, ha sido «un mal día» al aceptar CCOO, UGT, USO y CSIF abrir esa negociación para conseguir que se aumente la cobertura salarial del expediente por encima del 75 %.

«Nosotros estamos dispuestos a hablar de soluciones concretas para plantas concretas» en vez de la misma medida para todo el grupo porque esa flexibilidad endurece la aplicación del ERTE y la movilidad «multiplica el peligro» para las plantas de Azkoitia (Guipúzcoa) y Reinosa (Cantabria), afirman estas fuentes.

En el mismo sentido se ha expresado LAB, que ha mostrado su disconformidad con el planteamiento de la empresa de las medidas sobre las condiciones laborales que afectarían a toda la plantilla ya que ha considerado «más adecuado una actuación localizada en cada planta».

Por su parte, fuentes de la federación de Industria de LSB-USO han considerado que la oferta de la empresa de una cobertura del 75 % de los salarios es «insuficiente» y han criticado que no se dan garantías de empleo.

No obstante, han apuntado que «existen» las causas objetivas para el ERTE como expone la dirección -económicas, organizativas y productivas- por lo que los sindicatos deben negociar su aplicación, aunque ahora será con dos «mesas paralelas», una para el convenio y las condiciones laborales y la otra exclusivamente para las cuestiones del ERTE como los complementos salariales, bajas incentivadas o excedencias.

El ERTE afecta a más de 2.000 trabajadores de Sidenor y supone una reducción media del 50 % del tiempo de trabajo en el conjunto del grupo, aunque dicho porcentaje es mayor o menor según las plantas.

Ese porcentaje se sitúa en el 50 % en las oficinas generales de Basauri (Vizcaya) y las plantas de Legazpia (Guipúzcoa) y Azuqueca (Guadalajara).

Se eleva al 75 % en la de Reinosa (Cantabria), al 62 % en la de Azkoitia y al 100 % en la de Maltzaga (ambas en Guipúzcoa), cuya producción se trasladaría a la planta de Vitoria, en la que el porcentaje citado se situaría en el 35 %, el mismo que para la planta de Legutiano (Álava), mientras que sería de un 20 % para el centro de producción de Basauri y de un 39 % para el centro de Polinya (Barcelona)

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