Concentración de trabajadores de Alu Ibérica contra la apertura de expedientes sancionadores injustificados a representantes sindicales
Alrededor de 100 trabajadores de Alu Ibérica Avilés se han concentrado ante la portería de entrada a la antigua factoría de Alcoa en San Balandrán contra la persecución sindical llevada a cabo por el Grupo Industrial Riesgo, actual propietario de la planta aluminera. La concentración, que fue convocada por un comité de empresa, del que USO forma parte, se desarrolló entre las 3 y las 4 de la tarde, coincidiendo con los cambios de turno.
Las movilizaciones son consecuencia de la apertura de varios expedientes sancionadores contra representantes sindicales por parte de Grupo Riesgo por manifestaciones que tuvieron lugar en junio. Esto ha propiciado una reacción de los trabajadores, pues es “un ataque a los derechos y libertades sindicales. Queremos que se retiren los expedientes”, afirma David Nido, delegado sindical por USO en Alu Ibérica Avilés.
Grupo Riesgo sigue sin presentar un proyecto industrial claro a la plantilla y ya incurre en deudas
Según trabajadores y representantes sindicales en Alu Ibérica, las acusaciones planteadas por Grupo Riesgo respecto a las manifestaciones de junio son totalmente falsas. “Es probable que ahora preparen una jugada similar, ya que durante la concentración pudimos observar a personas sacándonos fotos desde dentro”, apunta Nido.
El porvenir de la situación que atraviesa Alu Ibérica se plantea incierto. “Grupo Riesgo no aporta un proyecto claro y ya tiene deudas con la Autoridad Portuaria y otros proveedores. Creemos sinceramente que el Ministerio de Industria debería intervenir”, comenta Nido. Industria fue garante de las diferentes operaciones de compraventa de Alcoa en A Coruña y Avilés. Sin embargo, Industria está desde hace meses ejerciendo una dejación de funciones en la vigilancia de los acuerdos que ha dejado desprotegidas a las plantillas de Avilés y A Coruña.
En la situación actual, USO pide el cese de los ataques a los derechos y libertades sindicales por parte de Grupo Riesgo y, por tanto, la retirada de los expedientes sancionadores. Además, USO se reafirma en que los hechos imputados por el nuevo propietario son rotundamente falsos.
